11.9.11

BUENOS AIRES: St Telmo - La Boca - Puerto Madero


Sobre las 9 de la mañana ya estaba desayunando, un continental que entra en el precio de la cama: mermelada, pan, cereales, fruta, café y un sucedanio de jugo de naranja. Me puse en marxa con la intención de dar un gran recorrido a pie por los diferentes barrios que me quedan cerca de casa. Empecé por St.Telmo. Las calles tranquilas anunciaban que hoy era dia domingo. Negocios cerrados y calles desiertas hasta llegar a su mercadillo de artesania: boleadoras, mates, antigüedades, ... Pareja de Tango acompañada de un magnifico guitarra amenizaba el agradable paseo entre las paraditas.

De allí me aventuré a caminar hasta el temido barrio de La Boca, o como les gusta llamar, República de la Boca. Una anciana me indicó que dirección debia seguir para llegar al Caminito, y que camino siempre debia evitar si queria conservar mis pertenencias, entre ellas mi ropa.




Llegué al Caminito, donde dice la historia que los inmigrantes que vivian allí se agrupaban en Conventillos y pintaban sus casas con los sobrantes de pintura que traían los marineros, como la pintura no alcanzaba para pintar una casa de un mismo color, se utilizaron diversos colores para hacerlo. Es un lugar que me encanta. Esos colores vivos mal o bien combinados, repetitivos... Hacen de ese lugar un espacio agradable, aun con muchedumbre. Suenan Tangos en todos los rincones. Tangos que te impregnan el cuerpo de romanticismo duro. Parejas que se ofrecen hacerse unas fotos con pose tanguera por unos pesos.

Cuando pude abandonar el lugar, me dirigí al lugar kish de Puerto Madero. Que contraste mas espectacular. Restaurantes a primera linia de dique. Caminando acabe mi ruta en la reserva natural de la Costanera. Lugar preferido por muchos porteños donde pasar el domingo y comerse unas hamburguesas en uno de los diferentes chiringuitos parrilleros del lugar. Jugar al balón en el césped... Pasar el domingo relajado. Me comí un sanwich de vacio. El vacio es un corte de la carne de vacuno. Pues ya comí vacio, facturas (pastas de dulces) y empanadas de carne. Solo me falta el vino!

Para concluir mi paseo, me encontré, de camino a casa, una macro fiesta brasileira! Me quedé embobado en una esquina mirando una Roda de Capoira, baile brasileño creado por los esclavos que mezcla la danza con la lucha. De hecho era una forma de lucha camuflada.

Cansado. Refrescandome con una buena cerveza fresquita. Mañana... Recoleta y Palermo.

Besos

Peri

PD: Tengo un problema, creo ser un adicto al mate. A las calabazas de mate!

1 comentario:

  1. Hola Peri,m'encanta còm expliques les coses, tens el do de transportar al que llegeix al lloc exacte on ets tu, vivint les mateixes coses, olors, músiques,....
    Cada moment, cada instant és únic, tinc clar que ho tens clar.
    Jo de gran vull ser com tu, jejejej
    Cuida't.
    Anna Urpí

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